Tras la propuesta de consulta, cada partido ha hecho un análisis previsible de la misma. Nadie, o casi nadie se ha salido del guión trazado con anterioridad, pero lo que sí ha sido curioso es que algunos utilicen justamente los argumentos contrarios a los utilizados anteriormente para el mismo fin. Por ejemplo, Patxi Lopez decía antes, que una condena de ETA en el texto de las preguntas era absolutamente innecesaria porque no hace falta formularla para saber la respuesta. Ahora critica que no la incluya. Sirve lo uno, lo otro y todo lo contrario para deslegitimizar la propuesta. Pero en el fondo, lo de menos son las preguntas y su contenido. De lo que se trata es de ver quién está de acuerdo con que l@s Vasc@s podamos, no ya decidir nuestro futuro, sino simplemente opinar acerca de él, y quiénes nos niegan incluso esa legitimidad.
Negar la posibilidad de opinar. De eso se trata. Antes decían que en democracia todas las opiniones, todos los proyectos son defendibles siempre y cuando sea democráticamente. Luego ya vimos que una cosa es defender una idea, y otra llevarla a la práctica. Ahora se trata de un pasito mas en esa cerrazón antidemocrática. No sólo no podemos llevar a la práctica nuestros proyectos, sino que ni siquiera se nos permite conocer ni dar nuestra opinión como sociedad.
La propuesta divide, dicen. Es decir, conocer la opinión de todos divide, pero imponer sus planteamientos, su Status quo, no. Miestras estemos como ellos quieren, no pasa nada. Pero si se nos ocurre simplemente cuestionar esa realidad, si nos planteamos consultar a la sociedad acerca de cuestiones que nos afecten a todos...ojito.
"Es anticonstitucional" dicen. OOOOHHHH!!!. Parece que diciendo eso, ya todo lo demás no importa. Las leyes se hacen para servir a la sociedad, y no la sociedad para servir a las leyes. Todo en este mundo es cuestión de voluntad. Y además las leyes, son interpretables. Según entiendo, la constitución no permitiría en este caso la celebración de un referendum sin la autorización de las cortes, pero no habla de consulta no vinculante. Además, el estatuto de Gernika, habla de habilitar mecanismos para fomentar la participación ciudadana en asuntos de interés. (con otras palabras por supuesto). Pero no vamos a entrar en debates jurídicos, que no son lo nuestro y no tenemos ni idea. Lo importante, siempre, es la voluntad que hay para hacer las cosas.
Por todo ello, en nuestra opinión, las preguntas son lo de menos. Lo importante es que se ha constatado la baja, bajísima calidad de una democracia que ni siquiera permite consultar a la ciudadanía acerca de cuestiones tan básicas como estas.
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