jueves, 26 de abril de 2007

Bixente. Inuxente

Hace unos cuantos años, la parroquia rojiblanca se animaba ante la llegada de un gran jugador. Un lateral que parecía iba a relegar a Larrazabal a una suplencia segura y quizá a una posible marcha del club.
Pero Bixente no era sólo eso. Representaba algo fundamental para quienes nos decimos abertzales. Un club que sólo ficha jugadores Vascos tenía en sus filas a alguien del otro lado de los pirineos. ¿Que iban a decir Anson y compañía, que decían constantemente que el Athletic les gustaba por jugar únicamente con jugadores "Españoles"?. No cabe duda que el fichaje tenía un trasfondo político. Como lo tiene la filosofía del Athletic. Jugadores Navarros juegan el el club en cuanto que son Vascos. No ficha Españoles. Ficha Vascos de todos los territorios de Euskal Herria.
Ahora Bixente saca una biografía en la que entre otras cosas dice que se preguntaba a veces en Bilbao "si hacía deporte o servía a una causa política".
Efectivamente en tu trayectoria has servido a una causa política en numerables ocasiones si. Te recuerdo de pié con la mano en el pecho. En las gradas banderas tricolor, y de fondo la Marsellesa. ¿que es eso si no es política?. ¿Que mayor exaltación patriótica que esta?.
Nunca he sido de ídolos, pero he de admitir que fué un motivo de alegría cuando vino a Bilbao. Lo fué en la misma medida que su marcha fué una gran decepción y una sensación de haber sido engañados.
Siento profundamente las amenazas y extorsiones que dice haber sufrido. Pero todo lo que representó para mí acabó cuando salió por la puerta de atrás de este gran club con engaños y mentiras.

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